Según Gary Chapman, escritor y filósofo, existen 5 lenguajes diferentes en el amor y es vital compartir el mismo lenguaje para que las relaciones fluyan no solo en la pareja, sino entre amigos, compañeros y familia.
Hoy en PSYconoce, hablamos de un libro que ha vendido más de 13.000.000 de ejemplares desde que se publicó por primera vez en 1992: Los 5 tipos de lenguajes del amor, de Gary Chapman.
Todos nos sentimos más cómodos al mantener una conversación en nuestra lengua materna, pero si conocemos otros idiomas, nos es posible entender mejor a otros y hacernos entender. Lo mismo sucede con los lenguajes del amor, Chapman destaca que cada persona tiende a expresar su amor y prefiere recibirlo de maneras concretas, pero nuestras relaciones mejoran cuando somos capaces de entender el lenguaje de los otros.
Para descubrir nuestro propio idioma o el idioma del amor de otra persona, uno debe observar la forma en la que le expresa amor a otros, analizar de qué se queja más y qué demanda más en sus relaciones.
Las personas suelen dar amor naturalmente de la manera en que prefieren recibir amor, por lo que la mejor relación entre personas puede alcanzarse cuando demostramos cariño en el idioma del amor de la persona que lo recibe.
Según Champan, solemos tener un idioma del amor primario y uno secundario, uno o dos tipos de lenguaje con los que nos sentimos más cómodos para expresarnos y con los que captamos mejor el amor que nos viene de fuera. Conocerlos, saber cuál encaja con nosotros, nos permite también comprendernos mucho mejor a nosotros mismos: saber de qué manera amamos, cómo esperamos que el otro lo haga y de qué forma podemos llegar a un equilibrio perfecto en la relación.
Veamos los cinco lenguajes del amor:
¿Qué tipos de lenguajes del Amor hay?
1. Palabras de Afirmación
En este grupo están las personas que se sienten amadas con palabras de afecto, elogios, un buen discurso, una carta o un poema bien escritos. Se sienten cómodos y libres de expresar todo lo que sienten a través de las palabras.
Las palabras dan expresión, sentido y dirección al amor. Ser conscientes del poder que tenemos con el lenguaje del amor a través de palabras, nos hace crear un nuevo mundo para expresar y recibir afecto y cariño. Las palabras tienen un poder increíble y dejan su huella en nuestro comportamiento.
Expresamos cariño al verbalizar palabras de ánimo, apoyo, afecto, felicitación, elogios, amabilidad o humildad hacia otro. Son palabras que causan un efecto muy positivo en la otra persona aumentando su autoestima, su seguridad y su bienestar.
Para comunicar nuestro amor a personas que prefieran este tipo de lenguaje, recomendamos emplear frases directas, simples y contundentes. Por ejemplo: “Te quiero mucho y te lo digo de corazón”, “Me encanta cuando me cuentas cómo te ha ido el día”,…
Para que sea creíble, es muy importante que lo sintamos de verdad para que nuestra expresión corporal sea coherente.
También es importante elegir el momento y el contexto adecuado.
2. Tiempo de Calidad
En este grupo están las personas que se sienten amadas al compartir tiempo de calidad, que no es tanto el acto (por ejemplo: una gran cena de lujo) como el disfrute de compartir, escuchando y siendo escuchados, sin prisas ni distractores. Expresan el amor compartiendo vida y pequeños momentos.
Dedicar tiempo a las personas que amamos es una forma de expresar lo que sentimos por ellas. Buscar en nuestras agendas tiempo de calidad, completo y lleno, dedicado en cuerpo y alma a la persona que nos acompaña no es solo algo aconsejable, es necesario.
Sin embargo, a menudo, descuidamos esta dimensión y lo damos todo por sentado: pensamos que nuestros padres y abuelos siempre estarán ahí, que nuestra pareja no tendrá dudas, que la rutina no tiene por qué erosionar los pactos y los compromisos.
Para comunicar nuestro amor a personas que prefieran este tipo de lenguaje, recomendamos recordar siempre que no basta solo con “estar”, nuestra presencia debe ser significativa.
3. Regalos
En este grupo están las personas que se sienten amadas cuando reciben grandes regalos, obsequios y pequeños detalles. Expresan el amor cuando son ellos mismos quienes dan regalos a los demás: disfrutan desde que tienen la idea, hasta después de haber dado el regalo al otro, sin esperar más que su sonrisa.
Los regalos no tienen porqué ser siempre objetos materiales, un detalle se ofrece y expresa de muchas maneras, pero siempre debe cumplir una norma: ese regalo es una forma de expresar amor por el otro y nunca un fin para conseguir algo.
Para comunicar nuestro amor a personas que prefieran este tipo de lenguaje, recomendamos elegir ese tipo de regalos que deja ver que quien lo regala ha estado tiempo esforzándose y pensando en ellas.
4. Actos de servicio
En este grupo están las personas que se sienten amadas cuando otros realizan actos o tareas como forma de comunicar lo que sienten. Expresan el amor tratando de agradar, sirviendo o haciendo favores a ciertas personas, el acto de servicio en sí mismo les resulta gratificante.
Cocinar, limpiar, arreglar cosas, cuidar el hogar en el que se vive, cuidar del otro cuando enferma, encargarse de las tareas más pesadas o desplazarse a sitios lejanos, son actos que realizan minuciosamente y con una sonrisa en la cara, sin esperar que devolvamos el favor o una respuesta inmediata compensatoria.
Son simples actos, pero que demuestran interés por el otro y que todos necesitamos sentir, tal y como nos explica en un estudio la doctora Jacqueline Olds, profesora asociada de psiquiatría en el Harvard Medical School, en nuestra vida diaria a veces descuidamos estas dimensiones. El trabajo, el estrés, otros factores hacen que descuidemos estas dimensiones tan básicas, tan esenciales.
Para comunicar nuestro amor a personas que prefieran este tipo de lenguaje, recomendamos anticiparnos a ellas en las tareas comunes pensando siempre: «no es una necesidad ni una obligación, sino algo que hago de manera generosa para ayudar y expresarle mi amor«.
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5. Contacto físico
En este grupo están las personas que se sienten amadas y disfrutan con las caricias y los abrazos, se sienten reconfortadas en los brazos de otros o con las manos unidas. Expresan el amor con el contacto físico como su lenguaje principal, sienten seguridad y felicidad a través del tacto; y sin el contacto no se sienten amados.
En nuestra primera infancia, este es el tipo de lenguaje que más nos nutre, el que nos ofrece alivio, seguridad, y afecto. A medida que crecemos, esa necesidad no se desvanece: seguimos sintiendo alivio al ser sostenidos o abrazados, disfrutamos con el contacto físico de las personas que amamos.
Entre todos los lenguajes del amor, este es sin duda uno de los más poderosos. Un estudio llevado a cabo en la Universidad Carnegie Mellon nos indica que gestos como los abrazos o las caricias elevan nuestras defensas y nos ayudan a combatir numerosas enfermedades e infecciones.
Es la forma de comunicación más sencilla y directa.
Para comunicar nuestro amor a personas que prefieran este tipo de lenguaje, recomendamos abrazarse, besarse, acariciarse, tocarse,… y en la pareja, además, tener relaciones sexuales frecuentes. Recordemos siempre que «las caricias dan forma al amor».
Conclusiones
Si no nos demuestran el amor a través de nuestro lenguaje de preferencia es posible que no nos sintamos amados. Según Elsa Punset en su Brújula para Navegantes Emocionales, es frecuente la pareja que acude a consulta verbalizando no recibir muestras de amor por parte del otro.
Conocer, identificar y compartir las distintas formas de amar supone una gran ayuda y nos aporta un plus para la comunicación.
Una vez visualizados los cinco lenguajes del amor pueden parecer obvios, pero si lo pensamos un momento, pocas veces le decimos a otras personas cuál es el que preferimos. Nadie es adivino, y obviar que el otro lo sabe, es un error muy frecuente.
Plan de trabajo:
- Conocer los 5 Lenguajes del Amor
- Identificarlos en nosotros mismos: ¿cuál es la forma en la que prefiero recibir amor? y ¿cuál es la forma en la que suelo expresar afecto? Es posible que cueste contestar a estas preguntas, así como identificar solo una por lo que pueden ser dos. Para hacerlo debemos recordar la intensidad y duración de la emoción que sentimos cuando recibimos las diferentes muestras de cariño, y la facilidad o frecuencia con la que realizamos estas (Hacer el Test · Los cinco Lenguajes del Amor).
- Compartirlos: Una vez identificados nuestros lenguajes preferentes debemos hacérselo saber a nuestras relaciones (cuando más se especifique mejor, recordemos que no hay que dar nada por obvio); y también pedir que nos expongan sus preferencias.
- Ponerlos en práctica: hay que tener paciencia porque cada persona se desarrolla en un contexto y se acostumbra a éste (por ejemplo: familias donde abrazarse es un ritual diario vs familias que nunca se abrazan). Lo que nosotros vemos normal, no es tan normal para otros y cambiar hábitos cuesta bastante. Por eso hay que tener paciencia durante el cambio, reforzar positivamente el esfuerzo del otro cuando realice el acto deseado y, si está haciendo caso omiso o no lo realiza como deseamos, explicárselo nuevamente (de forma distinta, a través de ejemplos, etc).
Un ejemplo: si el lenguaje del amor de un esposo es Actos de Servicio, el puede estar confundido cuando él lava la ropa y su esposa no percibe eso como un acto de amor. Ella lo ve solo como una tarea de la casa, porque el lenguaje del amor que ella entiende es Palabras de Afirmación (expresar verbalmente que la ama). Ella puede tratar de usar lo que ella valora, Palabras de Afirmación, para expresarle su amor por él, lo que él podría no valorar tanto como ella. Si ella entiende el lenguaje del amor y poda el césped por él, él lo percibirá en su lenguaje del amor como un acto de ella expresando su amor por él, de igual manera, si él le dice que la ama, ella valoraría eso como un acto de amor.
Para finalizar, simplemente añadir que toda persona sana tiene capacidad para expresarse en los cinco lenguajes del amor, y que en mayor o menor medida expresamos todos o casi todos. Elsa Punset afirma en su libro que: «si acostumbramos a nuestros hijos a dar y recibir amor de todos los lenguajes, el día de mañana podrán comunicarse libremente en todos ellos«.
Ahora, cerramos el PSYconoce de hoy citando a Gary Chapman
“Amor real. Este tipo de amor es de naturaleza emocional pero no obsesivo. Es un amor que une la razón y la emoción. Implica un acto de voluntad, requiere disciplina, y reconoce la necesidad del crecimiento personal”
· Hacer el Test · Los cinco Lenguajes del Amor ·
Y hasta aquí este blog, si te has quedado con ganas de más, te recomendamos ver el vídeo de este Blog que publicamos en YouTube 🙂
