El modelo sistémico en psicología ofrece una visión integradora y dinámica del comportamiento humano. Para entender a una persona, es esencial comprender el sistema en el que está inmersa: su familia, sus relaciones y su entorno. Este enfoque revolucionó el campo de la psicoterapia, especialmente en la terapia familiar, ya que no se centra en el individuo aislado, sino en sus interacciones dentro de un sistema.
Antecedentes teóricos relevantes del Modélo Sistémico
El modelo sistémico tiene raíces en diversas teorías científicas que le dieron forma. Estas teorías aportaron los fundamentos necesarios para comprender cómo los sistemas, ya sean biológicos, sociales o familiares, funcionan como un todo. Entre los antecedentes teóricos más relevantes destacan:
Teoría de los tipos lógicos de Whitehead y Russell (1910)
Esta teoría fue crucial para resolver paradojas lógicas. Propuso que existen dos tipos lógicos: clases y miembros.
Ejemplo: Si piensas en una familia como un sistema, los padres serían una «clase» (grupo), mientras que cada padre, como individuo, sería un «miembro». Esta distinción es clave para comprender cómo cada persona juega un rol específico dentro de un sistema familiar.
Teoría de los juegos de Von Neumann y Morgenstern (1944)
Von Neumann y Morgenstern desarrollaron modelos que permiten predecir la conducta en situaciones de juego, lo que Bateson aplicó para describir las dinámicas de alianzas y coaliciones en los sistemas familiares.
Ejemplo: En una familia con dos hijos, uno de ellos puede formar una coalición con el padre para influir en las decisiones familiares, mientras que el otro hijo puede aliarse con la madre. Esta dinámica es común en la vida familiar y refleja cómo los miembros del sistema establecen estrategias para cumplir sus objetivos.
Cibernética de Wiener (1948)
La Cibernética es una rama de las matemáticas que estudia los procesos de regulación, adaptación y autorreproducción en sistemas. La Cibernética de primer orden se centra en la realidad externa, mientras que la Cibernética de segundo orden incluye al observador como parte del sistema, lo que es esencial para entender la psicoterapia sistémica.
Ejemplo: Si un terapeuta observa la interacción familiar desde fuera, puede analizar cómo se regulan y adaptan los miembros entre sí (Cibernética de primer orden). Pero si el terapeuta forma parte activa del proceso de terapia, se convierte en parte del sistema familiar que está observando, lo que cambia la dinámica y la forma de intervención (Cibernética de segundo orden).
Teoría de la información de Shannon y Weaver (1949)
Esta teoría se centra en los aspectos formales de la comunicación, independientemente de su contenido.
Ejemplo: Imagina que en una familia los padres se comunican de manera ambigua con sus hijos, lo que genera confusión. Aunque las palabras que usan parecen claras, el ruido en la comunicación (interrupciones, gestos contradictorios, etc.) distorsiona el mensaje. El estudio de Shannon y Weaver ayuda a entender cómo mejorar la transmisión de información dentro del sistema familiar para evitar malentendidos.
Teoría General de Sistemas de Von Bertalanffy (1962, 1968)
Von Bertalanffy propuso que los sistemas son estructuras de elementos en interacción, cuya totalidad genera propiedades y un funcionamiento propio.
Ejemplo: En una familia, las interacciones entre los padres y los hijos crean una dinámica que no se puede reducir a las acciones individuales. Por ejemplo, si uno de los padres es sobreprotector, puede influir en el desarrollo de la independencia de los hijos, afectando a todo el sistema familiar.
Teoría de la comunicación humana de Paul Watzlawick (1967)
Watzlawick desarrolló una teoría basada en cinco axiomas que son ineludibles en la comunicación humana. Esta teoría fue aplicada extensamente al análisis de las interacciones familiares en el modelo sistémico.
Ejemplo: Uno de los axiomas establece que «no es posible no comunicarse». En una familia, incluso el silencio de un miembro puede enviar un mensaje claro al resto. Por ejemplo, un adolescente que se aísla en su cuarto está, en realidad, comunicando su malestar o necesidad de espacio.
Conceptos básicos de los modelos sistémicos
El modelo sistémico parte de la premisa de que el comportamiento de un individuo no se puede entender de manera aislada, sino como parte de un sistema. En el contexto familiar, las interacciones entre los miembros y sus relaciones constituyen el núcleo del análisis.
Suprasistema
El suprasistema hace referencia al entorno en el que se desenvuelve el sistema familiar, como la sociedad o comunidad más amplia.
Ejemplo: Una familia que vive en un entorno rural puede verse influenciada por las normas y valores tradicionales del suprasistema, mientras que una familia en una gran ciudad puede estar más abierta a diferentes formas de vida y creencias, lo que afectará la dinámica interna.
Subsistema
Dentro de una familia, existen subsistemas. Por ejemplo, el subsistema parental (padres) o el subsistema fraterno (hermanos). Es esencial que estos subsistemas tengan límites claros para que cada uno funcione de manera relativamente autónoma.
Ejemplo: El subsistema parental se ocupa de tomar decisiones importantes sobre el hogar y la educación de los hijos. Si los hijos empiezan a participar en estas decisiones, el subsistema parental puede perder su autoridad y generar confusión sobre los roles familiares.
Límites
Los límites son las reglas que regulan el intercambio de información y emociones entre subsistemas. Estos pueden ser:
Claros: Establecen una comunicación sana y diferenciada.
Ejemplo: Los padres permiten que los hijos expresen sus opiniones sobre ciertas decisiones familiares, pero los padres son quienes toman las decisiones finales sobre temas importantes como las finanzas o las reglas del hogar. Esto evita la confusión y establece un orden claro.Difusos: Generan baja diferenciación entre los miembros, compartiendo excesiva intimidad.
Ejemplo: En una familia con límites difusos, los hijos pueden participar en conversaciones privadas entre los padres, lo que puede llevar a que los hijos se sientan responsables de problemas que no deberían manejar, como la situación económica familiar.Rígidos: Limitan el intercambio, lo que puede aislar a los miembros.
Ejemplo: En una familia con límites rígidos, los padres pueden mantener a los hijos completamente al margen de cualquier decisión familiar o problema, lo que genera un distanciamiento emocional. Los hijos pueden sentirse excluidos o desatendidos.
Fronteras
Las fronteras separan la familia nuclear de su entorno (familia extensa, amigos, comunidad). Delimitan las interacciones externas y protegen la dinámica familiar interna.
Ejemplo: Una familia puede decidir que los abuelos o tíos no interfieran en la crianza de los hijos o en las decisiones importantes del hogar, estableciendo una frontera clara entre la familia nuclear y la familia extendida. Esto permite que la familia mantenga su autonomía y proteja su dinámica interna.
Sistema abierto vs. sistema cerrado
Sistema abierto: Intercambia información con su entorno.
Ejemplo: Una familia que enfrenta problemas económicos puede buscar el apoyo de la comunidad o acudir a un profesional financiero para encontrar soluciones. Este intercambio de información y apoyo externo ayuda a la familia a adaptarse y superar la crisis.Sistema cerrado: Se aísla de influencias externas y sufre las consecuencias de la entropía (empobrecimiento energético).
Ejemplo: Una familia que tiene conflictos internos graves, pero que no busca apoyo externo ni permite que otros intervengan, puede terminar acumulando tensiones y conflictos sin resolver, lo que puede llevar a un colapso en las relaciones familiares.
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Propiedades de la familia como sistema abierto
Las familias que operan como sistemas abiertos muestran varias propiedades esenciales que influyen en su funcionamiento. Estas propiedades son las que permiten que el sistema familiar se mantenga en equilibrio y crezca frente a las adversidades.
Totalidad
En un sistema, la conducta de cada miembro afecta a los demás, de modo que el sistema es más que la suma de sus partes.
Ejemplo: En una familia, si uno de los padres pierde su empleo, este evento no solo le afecta a él o ella, sino que toda la familia puede experimentar un cambio en la dinámica. Por ejemplo, los hijos pueden sentir preocupación por la estabilidad económica, o el otro padre puede asumir un rol más protagónico en el sustento del hogar. Lo que le pasa a un miembro afecta a todos los demás, ya que la familia actúa como un todo interconectado.
Causalidad circular
La conducta de un miembro influye en la de otro y viceversa, generando una secuencia de conductas repetitiva. Esta es la base de muchos problemas que surgen en la dinámica familiar.
Ejemplo: Si un hijo adolescente comienza a mostrar rebeldía, los padres pueden reaccionar imponiendo reglas más estrictas. Esto, a su vez, puede provocar que el hijo se rebele aún más, lo que refuerza la decisión de los padres de ser más estrictos. Este ciclo se retroalimenta y genera un patrón de interacción repetitivo y difícil de romper.
Equifinalidad
Un sistema puede alcanzar un mismo estado final partiendo de condiciones iniciales diferentes. Esto significa que diferentes eventos pueden llevar a la misma solución o problema en una familia.
Ejemplo: Dos familias diferentes pueden enfrentar problemas financieros. Una puede llegar a la solución de pedir ayuda externa, mientras que la otra decide reestructurar su presupuesto. Aunque partieron de situaciones distintas, ambas familias logran estabilizar su economía, mostrando que hay diversas maneras de llegar al mismo resultado.
Equicausalidad
Por el contrario, un mismo evento inicial puede llevar a diferentes resultados dependiendo de la dinámica particular del sistema.
Ejemplo: Imagina que dos familias experimentan la muerte de un ser querido. En una de ellas, este evento trágico los une y fortalece los lazos familiares, mientras que en la otra provoca conflictos y distanciamiento. A pesar de que el evento fue el mismo, la respuesta de cada familia es distinta debido a su dinámica interna.
Homeostasis y morfostasis
El sistema tiende a mantener su equilibrio (homeostasis), pero también debe permitir el cambio para asegurar su supervivencia y desarrollo (morfogénesis).
Ejemplo: En una familia que mantiene una rutina estricta, el objetivo es mantener la estabilidad y orden (homeostasis). Sin embargo, si un miembro de la familia, como un hijo adolescente, necesita mayor libertad para crecer, la familia deberá adaptarse y permitir cambios en las reglas (morfogénesis) para asegurar que todos los miembros puedan desarrollarse de manera saludable.
Feedback y feedforward
Feedback: El feedback es la retroalimentación que reciben los miembros del sistema sobre su comportamiento. Puede ser positivo (refuerza conductas) o negativo (corrige).
Ejemplo: Si un hijo ayuda con las tareas del hogar y los padres lo felicitan (feedback positivo), es probable que continúe realizando estas actividades. Si, por el contrario, los padres critican una mala conducta y aplican consecuencias (feedback negativo), el hijo sabrá que debe modificar su comportamiento.Feedforward: El feedforward es la retroalimentación anticipativa, donde se predicen las conductas futuras de otros miembros y se actúa en consecuencia.
Ejemplo: Si los padres saben que su hijo tiende a reaccionar con frustración ante las tareas escolares, pueden anticiparse a esto proporcionándole una estructura más organizada y apoyo adicional para que se enfrente mejor a sus deberes. Esto permite evitar problemas antes de que surjan, ajustando las condiciones a las necesidades del hijo
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Referencias
- Whitehead, A. N., & Russell, B. (1910). Principia Mathematica. Cambridge University Press.
- Wiener, N. (1948). Cybernetics: Or Control and Communication in the Animal and the Machine. MIT Press.
- Watzlawick, P., Beavin, J. H., & Jackson, D. D. (1967). Pragmatics of Human Communication: A Study of Interactional Patterns, Pathologies, and Paradoxes. W. W. Norton & Company.