✔️ Qué son las DISTORSIONES COGNITIVAS · Definición y Ejemplos · TEORÍA COGNITIVA de Aaron Beck ·

¡Hola PSYCOlógicos!

¿Te ha ocurrido alguna vez que interpretas un suceso de manera catastrofista mientras que los demás no ven nada por lo que alarmarse?

Por ejemplo: estás en tu trabajo y el jefe simplemente te dice una mañana “buenos días”, entonces tu mente empieza a funcionar a toda velocidad y tu piensas que, como nunca te lo había dicho directamente a ti y menos aún en ese tono, significa que algo malo va a pasar y que te acabarán echando del trabajo. Acabas de tener una distorsión cognitiva.

Todos podemos llegar a sufrir alguna distorsión cognitiva, y, en mayor proporción, las personas que padecen un trastorno depresivo. En este blog vamos a enumerar  y a explicar con ejemplos cada una de las distorsiones cognitivas. Así podremos comprenderlas y detectar si padecemos o hemos padecido alguna vez una distorsión cognitiva.

Antes de enumerar y definir cada una de las distorsiones cognitivas es importante conocer la teoría cognitiva de Beck. Aaron Beck era un psiquiatra americano que no apoyaba las teorías psicodinámicas de la depresión. Planteó que la sintomatología de la depresión no son síntomas anímicos sino cognitivos, es decir del pensamiento, y que la base del trastorno depresivo es una distorsión al interpretar de forma negativa e irreversible los acontecimientos vitales.

Para Beck la primera causa de la depresión se encuentra en la existencia de esquemas disfuncionales depresógenos. Los esquemas son estructuras de percepción cognitiva que nos ayudan a otorgar significado a lo que nos rodea. La mayoría de nuestros esquemas se forman en edades tempranas, por lo que los niños que son criados de una manera inadecuada o pierden a sus padres son tendentes a desarrollar esquemas disfuncionales o depresógenos. Estos esquemas disfuncionales se diferencian de los esquemas de personas no vulnerables a la depresión, tanto en contenido como en estructura.

Para Beck, los esquemas depresógenos son el principal factor de vulnerabilidad cognitiva para la depresión pero pueden mantenerse inactivos durante mucho tiempo porque, para que se activen, debe producirse un suceso estresante. Por ejemplo: una persona ha construido un esquema depresógeno por haberse sentido poco querida por su madre en su infancia y alberga sentimientos de abandono. En su vida adulta, cuando su pareja rompe la relación, se activa el esquema depresógeno que construyó en su infancia y experimenta las mismas sensaciones de sentirse poco querida y abandonada.  

Para Beck, los esquemas disfuncionales depresógenos son de dos tipos: de sociotropía (se activan ante fracasos interpersonales) y de autonomía (se activan ante el fracaso personal).

Al activarse los esquemas depresógenos el procesamiento de la información empieza a distorsionarse y deformamos la realidad que percibimos. Estos sesgos se denominan distorsiones o errores cognitivos y contribuyen al mantenimiento de la validez de las ideas depresivas en el sujeto deprimido. Os hago una comparación muy gráfica: los esquemas actúan como el cristal de las gafas con las que cada uno vemos el mundo. 

Las distorsiones cognitivas se producen en todas las personas y, con más frecuencia, en las personas con trastorno depresivo. Como resultado de este proceso distorsionado de procesamiento de la realidad, el contenido del pensamiento depresivo configura la siguiente triada cognitiva negativa:

  • Visión negativa de sí mismo: soy alguien inútil, indeseable, sin valor.
  • Visión negativa del mundo: vivo en mundo con obstáculos insuperables, desprovisto de alegrías.
  • Visión negativa del futuro: sé que los acontecimientos negativos actuales no podrán modificarse en el futuro.

Ahora que ya hemos aprendido los conceptos básicos de la teoría cognitiva de Beck, vamos a enumerar y definir cada una de las distorsiones cognitivas. Presta mucha atención para descubrir si padeces o has padecido alguna:

La primera distorsión: INFERENCIA ARBITRARIA. La inferencia arbitraria es el proceso de llegar a una conclusión sin una evidencia que la apoye o con una evidencia contraria a la conclusión. Os pongo un ejemplo: una persona sube a un taxi y piensa “El taxista cree que soy un don nadie”; cuando posteriormente le preguntamos por qué ha pensado eso, admite que no había una base real para pensarlo. 

Segunda distorsión: ABSTRACCIÓN SELECTIVA. La abstracción selectiva es la valoración de una experiencia centrándose en un detalle específico fuera de contexto, ignorando otros elementos más relevantes en esa situación. Por ejemplo: el jefe de un paciente estaba comentando positivamente con él su trabajo aunque, en un momento de la conversación, le pidió que no hiciera copia de las cartas que recibía. El paciente pensó «Mi jefe no está contento con mi trabajo».

Tercera distorsión: GENERALIZACIÓN EXCESIVA. La generalización excesiva es el proceso de extraer una conclusión y elaborar una regla general a partir de uno o varios hechos aislados, aplicando esta regla tanto a situaciones relacionadas con el hecho en cuestión como a situaciones que no tienen nada que ver. Por ejemplo: la mujer de un paciente depresivo se enfadaba porque los niños tardaban en vestirse. Entonces, el paciente pensaba: «soy un mal padre porque si no mis hijos tendrían más disciplina».

Cuarta distorsión: MAGNIFICACIÓN Y MINIMIZACIÓN. Errores cometidos al evaluar la magnitud o la significación de un acontecimiento incrementando o disminuyendo su significación. Por ejemplo: una persona, después de que su casa sufriera varios destrozos por una tormenta, valoró los daños inicialmente en varios miles de euros. El precio final de la reparación fue, sin embargo, de unos cincuenta euros.

Quinta distorsión: PERSONALIZACIÓN. La personalización es la tendencia a atribuirse sucesos externos sin ninguna base firme que nos permita realizar esta conexión. Ejemplo: un médico residente de hospital se deprimió al leer el aviso de que todos los pacientes a cargo de un residente deberían ser posteriormente examinados por un médico de plantilla. Su pensamiento cuando leyó el aviso fue: «El jefe no se fía de mi trabajo».

Y la última distorsión: PENSAMIENTO ABSOLUTISTA O DICOTÓMICO. Esta distorsión es la tendencia a clasificar todas las experiencias en una o dos categorías opuestas (blanco o negro), seleccionando la categoría del extremo negativo para describirse a uno mismo. Ejemplo: un jugador de baloncesto pensaba «soy un fracasado” y se deprimía sí encestaba menos de 8 puntos en un partido; pero si encestaba 8 o más puntos pensaba «soy realmente un gran jugador» y se sentía muy alegre y eufórico.

Muchas personas hemos tenido o tenemos alguna distorsión cognitiva, esto no indica algo patológico. Nos gustaría saber qué distorsiones has tenido  alguna vez en tu vida y, si te sientes cómodo, que lo compartas con nosotros en los comentarios. Ya sabéis que juntos aprendemos más.

Y hasta aquí este blog. Puedes ver el vídeo que publicamos en YouTube referente a este tema. 

Si necesitas asistencia psicológica soy Psicólogo en Valencia (España) y también soy Psicólogo online. Puedes solicitar una cita a través de esta web mediante el formulario de contacto

 

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