Desde los primeros momentos de la vida, los seres humanos estamos equipados para empezar a descubrir el mundo que nos rodea. Sin embargo, ¿te has preguntado cuándo comienzan a ver los bebés y qué es lo que realmente perciben? Este intrigante viaje por el desarrollo de la percepción visual no solo satisface una curiosidad fundamental, sino que también arroja luz sobre cómo los bebés interactúan y se conectan con su entorno desde una edad muy temprana.
El Amanecer de la Visión: ¿Cuándo Comienzan a ver los Bebés?
Desde el instante mismo del nacimiento, los bebés se encuentran inmersos en un entorno repleto de estímulos visuales. No obstante, su capacidad para interpretar y dar sentido a este caudal de información visual está inicialmente restringida. Cuando comienzan a ver los bebés, su visión es difusa, concentrándose su capacidad visual en objetos que se encuentran a una distancia de entre 8 a 10 pulgadas. Esta distancia no es aleatoria; corresponde al espacio aproximado entre el rostro de una madre y su bebé durante el amamantamiento, lo cual subraya la importancia de esta habilidad visual inicial en el fomento del vínculo afectivo y el reconocimiento de rostros.
Esta fase inicial de la percepción visual es fundamental porque sienta las bases para el desarrollo de interacciones sociales más complejas. La habilidad de enfocar y reconocer el rostro de la madre permite al bebé comenzar a establecer conexiones emocionales y cognitivas, fundamentales para su desarrollo integral.
Evolución de la Percepción Visual
A medida que los bebés crecen, experimentan un rápido avance en su percepción visual. Durante las primeras semanas de vida, empiezan a mostrar capacidad para seguir con la mirada objetos que se mueven, marcando un hito crucial en el desarrollo de su comprensión sobre la continuidad y la percepción espacial. Esta habilidad es un indicativo temprano de la capacidad del bebé para interactuar con su entorno de manera más significativa. ¿Cuándo es el desarrollo de la percepción visual más notable? A los dos meses de edad, se produce un salto cualitativo en esta capacidad. Los bebés no solo empiezan a discernir colores, sino que también muestran una clara preferencia por los rostros humanos sobre otros tipos de estímulos visuales. Este fenómeno destaca la predisposición innata hacia la interacción social y el reconocimiento de patrones faciales, elementos cruciales en el desarrollo emocional y cognitivo del niño.
Innovaciones en la Investigación Visual
Las investigaciones de Robert Fantz han sido fundamentales para comprender mejor esta evolución de la percepción visual en los bebés. Al introducir el concepto del tiempo de fijación de la mirada, Fantz proporcionó una herramienta invaluable para medir de forma indirecta cómo los bebés procesan diferentes estímulos visuales. Sus experimentos demostraron que, contrariamente a la creencia popular de la época, los recién nacidos tienen una capacidad visual funcional que les permite preferir ciertas imágenes sobre otras, sugiriendo una discriminación visual temprana.
Además, los trabajos sobre el abismo visual de Eleanor Gibson y Richard Walk ampliaron nuestra comprensión sobre cómo los bebés perciben la profundidad. Al utilizar una superficie transparente dividida entre una zona segura y una zona profunda, Gibson y Walk descubrieron que los bebés de seis meses evitaban cruzar hacia la zona que percibían como peligrosa, demostrando así una comprensión temprana de la profundidad y la percepción espacial.
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Esquema del Desarrollo de la Percepción Visual en Bebés
Para entender mejor cuándo comienzan a ver los bebés, y de que estadíos constan sus diferentes hitos, nada mejor un esquema que lo resuma todo:
Percepción del Espacio Visual
- Edad: 6 meses
- Habilidad Desarrollada: Noción básica de la profundidad.
- Método de Estudio: Experimento del «abismo visual».
- Observaciones: Capacidad de los bebés para reconocer diferencias en la profundidad y evitar cruzar superficies percibidas como inseguras.
Percepción de Objetos
- Edad: 4 meses
- Habilidad Desarrollada: Constancia de forma.
- Significado: Entendimiento de que un objeto es el mismo a pesar de cambios en la perspectiva.
- Importancia: Precursor clave para la cognición espacial y el reconocimiento de objetos.
Percepción del Rostro Humano
- Edad:
- 2 meses para el reconocimiento de rostros familiares.
- 5 meses para distinguir diferentes expresiones faciales.
- Habilidad Desarrollada: Preferencia innata por rostros humanos y reconocimiento de rostros familiares y expresiones faciales.
- Importancia: Crucial para el desarrollo social y emocional; permite interpretar y responder a señales sociales.
- Edad:
Percepción del Tamaño, la Forma y la Luminosidad
- Edad: 5 a 7 meses
- Habilidades Desarrolladas:
- Constancia de tamaño y forma.
- Constancia de la luminosidad.
- Significado: Comprensión de que los objetos mantienen sus características a pesar de cambios en la distancia, perspectiva o iluminación.
- Importancia: Fundamental para entender el mundo físico y para el desarrollo de la percepción visual.
Conclusión
La percepción visual actúa como una ventana esencial por la cual los bebés exploran y aprenden sobre su mundo. Al indagar sobre cuándo comienzan a ver los bebés, descubrimos que no solo están aprendiendo a enfocar y reconocer formas, sino que también están en el proceso de desarrollar habilidades críticas para su interacción y desarrollo emocional. Cada nuevo avance en su capacidad visual marca el inicio de descubrimientos y conexiones más profundos con las personas y el entorno que les rodea. Este proceso complejo y fascinante subraya la importancia de apoyar el desarrollo visual desde una edad temprana, proporcionando a los bebés un entorno rico en estímulos que fomente su crecimiento cognitivo y emocional.
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Referencias
- Gibson, E. J., & Walk, R. D. (1960). The «Visual Cliff». Scientific American.
- Fantz, R. L. (1963). Pattern vision in newborn infants. Science.
- Maurer, D., & Salapatek, P. (1976). Developmental changes in the scanning of faces by young infants. Child Development.
- VASTA, R. (1996). Child Psychology.
